Hendrik Valgva y su camión Actros 1848: "No soporto el olor a polvo y moho. ¡Necesito aire fresco en la cabina!

Un camión limpio y ordenado es muy importante para la mayoría de los conductores. Para Hendrik Valgma, de Tallin, esto no es suficiente: "No soporto el olor a polvo y moho. ¡Necesito aire fresco en el habitáculo!” Y es lógico que este hombre de 43 años conduzca él mismo su Actros 1848 amarillo y no sólo muestre su interés a la hora de limpiar, sino que también pueda ventilar según sus deseos. ¿Quizás esto también explique que en la cabina del conductor haya una tetera en lugar de una cafetera?

Cuanto más grande, mejor.

Como en otras situaciones, Hendrik sabía desde pequeño lo que le gustaba. Trabajar con máquinas grandes: eso es lo que quería desde pequeño. "Cuanto mayor, más divertido", dice el padre de una niña de 9 años y recuerda: "Cuando tenía 12 años, fui una vez a Rusia. Lo que más me impresionó fue un enorme camión naranja. Conducir un camión así sería una experiencia fantástica…”

Siempre Mercedes-Benz.

Mientras tanto, Hendrik lleva 12 años haciendo esto y nunca se ha arrepentido de su decisión. Sin duda, otra constante le ayudó en su vida profesional: "Desde que trabajo como conductor, sólo conduzco camiones Mercedes", subraya Hendrik. "El aparcamiento de la empresa incluye principalmente camiones Mercedes. Y, por supuesto, mi camión tiene una estrella".

Durante las vacaciones, el mundo parece completamente diferente. Para viajes largos, Hendrik prefiere el avión. Junto con su pareja y su hija, se sienten especialmente atraídos por Noruega o los Alpes. Pero si pasa sus vacaciones en Estonia, se alegrará si alguien más se pone al volante.

Los barcos no le interesan en absoluto: "Estar en el mar tiene algo siniestro, prefiero caminar por la playa". Lo mejor sería algún lugar en el Caribe, a él le gustaría viajar allí al menos una vez. Cuando no sueña con las vacaciones, a Hendrik le gusta ver películas. Esto tiene una gran ventaja: se puede utilizar prácticamente en cualquier momento y en cualquier lugar: en casa, en el cine o en la cabina del conductor bien ventilada. Por supuesto, sólo con el camión parado.